Este no es un libro más sobre alimentación. No vas a encontrar dietas mágicas ni un método maravilloso para adelgazar. De hecho, se propone sacar el foco de la pérdida de peso como única preocupación asociada a nuestros hábitos alimenticios.
Como lectores, recorreremos con asombro las estrategias de una industria alimenticia que se esfuerza por vendernos productos que no son lo que dicen ser, a través de campañas de marketing demenciales. Durante el trayecto derribaremos mitos muy instalados sobre la alimentación, esos que todos damos por verdaderos.
La buena noticia es que después de interpelarnos, los autores nos brindan herramientas para apropiarnos de nuestras decisiones en torno a la alimentación, para convertirnos en consumidores informados que no se dejan engañar por el envoltorio.